FISIOTERAPIA RESPIRATORIA

En pediatría, la fisioterapia respiratoria tiene como objetivo el drenaje de las secreciones de las vías aéreas, tanto superiores como pulmonares, con la técnica de «Aceleración del flujo espiratorio dirigido».

El drenaje de las secreciones con la fisioterapia, asociado con el tratamiento farmacológico, permite reducir el riesgo de surinfección pulmonar y sus complicaciones, reduciendo el tiempo de recuperación.

La fisioterapia pediátrica se aplica en niños con bronquiolitis, bronquitis o neumonía.

Con el adulto, la fisioterapia respiratoria se aplica en casos de EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica).​​

¿Cuáles son los beneficios de la Fisioterapia Respiratoria en la EPOC?

Mejora el drenaje de secreciones.

Previene, trata o minimiza la magnitud de las infecciones respiratorias, evitando complicaciones como neumonías y atelectasias.

Mejora la ventilación pulmonar y la oxigenación.

Facilita la entrada y absorción de los medicamentos inhalados.

Ayuda al paciente en el control ventilatorio, principalmente durante esfuerzos o el ejercicio físico para prevenir o controlar la aparición de la disnea.

Potencia la musculatura respiratoria.

Readapta al esfuerzo por medio de entrenamiento físico y muscular.

Mejora la calidad de vida del paciente, disminuyendo las complicaciones y los ingresos hospitalarios.

¿En qué consiste la Fisioterapia Respiratoria en la EPOC?

Consiste en ejercicios respiratorios que el paciente realizará y aprenderá en la consulta, para posteriormente hacerlos diariamente en su domicilio. Con estos ejercicios trabajará la ventilación pulmonar, se relajarán o fortalecerán, según la necesidad, los músculos respiratorios y del tórax, y se adaptará o modificará el patrón respiratorio para que sea más eficaz en los esfuerzos. Si hay acúmulo de secreciones, las técnicas de drenaje y expectoración, son fundamentales para prevenir infecciones frecuentes.